Una
dieta con alto contenido en agua
La acelga está constituida por un 97% de agua cuando se consume hervida y
llena de hierro, vitaminas y minerales se convierte en un alimento de pocas
calorías, pero con grandes beneficios para la salud.
El tomate con un 93% de agua y abundante en licopenos antioxidantes, el tomate es un
alimento muy versátil para adicionar a cualquier plato y dar volumen sin sumar
calorías.
El melón tiene un 92% de agua y un intenso sabor dulce que puede reemplazar
a una golosina poco saludable. Es un alimento lleno de nutrientes beneficiosos,
con pocas calorías, sin grasas y que colabora con la pérdida de peso.Estos son alimentos naturales con un
aporte nutritivo saludable, pero al mismo tiempo, con alto contenido acuoso que
permite reducir sus calorías sin tener que cuidar la cantidad que consumimos.
Otros alimentos como la gelatina que es 100% agua, lo cual permite
combinarla con otros alimentos para dar volumen a la preparación sin sumar
calorías.
La infusiones (100%) son otra opción para hidratarte si te aburres
del vaso de agua a cada rato. Manzanilla, menta, poleo o té verde son las
mejores para alcanzar el equilibrio hídrico. Con el café y el té negro deberás
tener precaución por su poder excitante.
La sandía contiene más del 90% de agua con
escaso aporte de carbohidratos provenientes de la fructosa y la pulpa de la
fruta, lo cual representa un valor calórico muy bajo (15% aproximadamente) que
junto a su agradable y suave sabor dulce permiten calmar la ansiedad y tu
apetito.
La naranja (88%) contiene mucha fibra y vitamina C, para comer o
beber. El jugo puedes tomarlo solo o con otras frutas o verduras. Ayuda a
regular la tensión, la circulación y la temperatura corporal.
La
leche (87%) es un buena fuente de proteínas y calcio, además de vitaminas y
minerales. Un vaso de leche, además de nutrir, refresca y sacia la sed. Tienen gran aporte de agua, pero en este caso, la saciedad que
generan no es la misma, tal vez porque no requieren masticación ni su volumen
es tan representativo como en el caso de la lechuga, por ejemplo.
La lechuga es ideal para comer en ensaladas frescas y colmar nuestros
platos de alimento que no incrementa las calorías de la dieta, aunque exige
masticación y nos brinda fibra, vitaminas y minerales que no sólo colaboran con
nuestra pérdida de peso, sino que contribuye a la salud.
La merluza (75%) es un pescado con bajo contenido en grasas,
aporta muchas vitaminas del grupo B, que combaten la fatiga, depresión y
debilitamiento de las defensas.
El brócoli es una de las verduras más consumidas en España. Sus grandes propiedades nutritivas y antioxidantes, contiene grandes cantidades de vitamina C, ácido fólico y caroteno beta (vitamina A) entre otras.
El yogurt: el yogurt, producto lácteo, es fuente de calcio. Lo hace muy beneficioso para nuestro organismo.
Las Manzanas son una fruta procedente del manzano con gran cantidad de pectina (fibra soluble). Ayuda en la disolución del colesterol y es una buena arma contra la diabetes.
El huevo contiene un 74% de agua. Es una fuente importante de
proteínas, fósforo y hierro. El mayor aporte hídrico lo proporciona la clara.
Los pepinos son los alimentos que más agua contienen. En verano se suele consumir muchos pepinos, sobre todo en las ensaladas, donde quedan tan bien. La sabiduría popular le atribuye propiedades benéficas para la salud en el tratamiento de la gota, la obesidad y enfermedades del corazón.
Los rábanos es el segundo alimento que más agua tiene. Existen varios tipos de rábanos: blancos, rojos, negros o morados y, de diferente forma, redondo o cilíndrico. Los rábanos se suelen consumir crudos. Lo más beneficioso de los rábanos es su gran poder antioxidante.
El apio tiene el tallo alargado, grueso y hueco. Es un vegetal muy nutritivo, tiene vitaminas, del grupo B, A, C y E, también contiene varios minerales, entre ellos, fósforo, hierro, azufre, potasio, cobre, manganeso, zinc y aluminio.